La primera ministra británica Theresa May sobrevivió, por un margen estrecho, a una moción de confianza en el Parlamento, y el drama del brexit continúa. Los líderes de la oposición dicen que no se reunirán con May para buscar un proyecto de salida del Reino Unido de la Unión Europea, hasta que ella ceda en algunas de sus llamadas líneas rojas, incluida la posibilidad de no aceptar un escenario de acuerdo.
May invitó a los líderes políticos a las conversaciones multipartidistas sobre una manera de avanzar en el brexit después de que ganó por poco el voto de confianza en el Parlamento. Pero el líder laborista, Jeremy Corbyn, dijo que antes de que pueda haber discusiones positivas sobre el camino a seguir, "el Gobierno debe eliminar claramente, de una vez por todas, la posibilidad de la catástrofe de un brexit sin acuerdo de la UE, y todo el caos que vendría como resultado de eso”.
Faltan poco más de dos meses para el plazo de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea y en los próximos días May debe buscar un nuevo acuerdo. La suerte está echada.